martes, marzo 21, 2006

El reinado de la hipocresía

No puedo evitar suspirar hondamente cuando me dispongo a comenzar este artículo, pensando en lo que todo ha ocurrido en estos 3 años desde el comienzo de la 2ª guerra del Golfo. Así es, con este texto pretendo hacer una minúscula reflexión sobre eventos como la ocupación de Irak y demás acontecimientos adyacentes, y a la vez no apartarme del tema de este blog, porque, seamos honestos, hay pifias mucho más graves que las lingüísticas y las de diseño, y que afectan a las vidas de personas inocentes. Y no es nada complicado encontrar las proverbiales pifias examinando lo ocurrido estos últimos años, aunque no pretendo extenderme demasiado; únicamente quiero dar un par de pinceladas para poner en perspectiva las cosas. Empecemos con G. W. Bush.

George Walker Bush... qué se puede decir sobre él que la gente no sepa (o decida ignorar por voluntad propia). Un "draft dodger" como dicen en EE.UU., esto es, alguien que se "escaquea" del cumplimiento del servicio militar pero que no tiene reparos en enviar a sus compatriotas a luchar, morir y matar en una guerra injustificada. Engañó a su pueblo haciéndoles creer que Saddam Hussein formó parte del complot del 11-S y a pesar de los millones de personas que literalmente "gritaban" oponiéndose a la guerra, siguió con los planes que ya había trazado. Nunca entenderé cómo se puede comenzar un proceso de impeachment (destitución) contra un presidente por recibir una felación en su despacho y no contra otro que ha engañado a su pueblo y ha tomado decisiones políticas influidas por sus propios intereses económicos.
Uno de los platos fuertes es la base militar de Guantánamo Bay: un lugar en el que no se aplican las leyes norteamericanas porque legalmente el terreno no es de EE.UU., a pesar de estar repleto de tropas estadounidenses. Los desafortunados que han acabado con sus huesos en semejante lugar no tienen derecho, entre otras cosas, a un juicio; por no tener derechos ni se les permite realizar huelgas de hambre.

Fotomontaje de George W. Bush realizado
con fotos de soldados muertos en Irak

Y el tema de Guantánamo enlaza perfectamente con el siguiente personaje: el fiscal general John Ashcroft. Se trata de una persona con una moral tan férrea que no consintió que hubiera esculturas semidesnudas en los juzgados estadounidenses y consiguió que fueran "tapadas" con telas azules. Pero, oh sorpresa, no se le mueve la conciencia con los presos mencionados anteriormente.

» Artículo sobre las esculturas en la web de la BBC «

Fotomontaje de John Ascroft realizado
con imágenes pornográficas
En un mundo ideal regido por la justicia o, más aún, la pura lógica, ahora mismo no estaría escribiendo este artículo, y 33.000 civiles irakíes seguirían vivos, Bush se habría dedicado a pasar largos periodos de vacaciones en su racho de Crawford (que básicamente es lo que ha estado haciendo estos últimos daños) pero sin hacer daño al planeta, Javier Cárdenas nunca habría estrenado en cines su engendro "F.B.I. Frikis Buscan Incordiar" y todos tendríamos trabajos dignos.

Ahh, uno puede soñar...